Judocas Boissard, Mateo y Pérez, forzados al retiro en pleno desarrollo
SANTO DOMINGO. Descontento, así como decisiones de entonces directivos de la Federación Dominicana de Judo (Fedojudo), calificadas de arbitrarias, provocaron el retiro a destiempo de los judocas Bernardo Pérez, Diego Mateo y José Boissard.
Con el talento en pleno desarrollo, los tres atletas manifestaron que fueron vejados y víctimas de amonestaciones que incidieron en dejar el judo y emigrar a otro país en busca de mejores condiciones de vida.
Los tres deportistas de alto rendimiento expresaron sus sentimientos al tomar parte en el XI Foro virtual con ex atletas de la selección nacional de Judo que representaron al país en los pasados Juegos Centroamericanos y del Caribe celebrados en Maracaibo, Venezuela, en 1998.
Bernardo Pérez, nativo de San Juan de la Maguana, y quien reside en Estados Unidos, dejó el judo a los 21 años tras cuatro años (94-98) en la selección superior.
“Nos vimos forzados a dejar la selección tras una amonestación. Cuando dejé el judo estaba en mi mejor momento y condiciones físicas”, aseguró Pérez, quien fue medallista de bronce en los Centroamericanos de Maracaibo 98, así como ganador de dos preseas de bronce en campeonatos superior Panamericano.
Diego Mateo, quien habita en Miami, compitió en los 81 kilos. Comenzó a practicar el judo a los cinco años, en 1983, y se retiró en el 2000 después de seis años en la selección superior.
“En mi época se hizo mucho daño al judo”, comentó Mateo, quien al momento de emigrar a Estados Unidos ya estaba clasificado para los Juegos Olímpicos de Sidney, Australia, y no participó porque ya estaba en su mente emigrar.
El graduado de electrónica industrial fue medallista de oro en los Juegos Universitarios y en el Festival Olímpico, ambos campeonatos celebrados en el 2000 en Puerto Rico. También resultó campeón en los Circuitos Panamericanos celebrados en Santo Domingo.
José Boissard era lanzador derecho. Era de la generación de beisbolistas como Raúl Mondesí, José Guillén y recibía asesoría de José Rijo. Pero una lesión (tendinitis) lo alejó del terreno y luego fue seducido por compañeros de judo de su natal San Cristóbal.
A los ocho años inició la práctica del judo y a los 12 decidió jugar béisbol. “Cuando estaba para firma me lesioné el hombro”, comentó Boissard, quien ingresó a la selección nacional de judo en el 97 y en el 98 asistió a los Juegos Centroamericanos de Maracaibo.
El ex atleta comentó que se retiró en el 2004, con apenas 18 años, motivado por el conflicto que surgió entre el judoca Vicbart Geraldino y Jaime Casanova, entonces presidente de la Fedojudo.
“Para ese entonces los atletas no éramos nada. Nosotros peleábamos con el corazón, un equipo invencible”, sostuvo Boissard, quien reside en Estados Unidos desde el 2004.
El XI Foro virtual con ex atletas de la selección nacional de Judo que representaron al país en los Juegos Centroamericanos y del Caribe Maracaibo 1998 fue organizado por la Fedojudo con la coordinación de Leidi Germán, directora técnica de la entidad.