Dos muertos y 18 heridos, uno grave, por una explosión en Madrid
La fuerte explosión ocurrida este viernes en el madrileño barrio de Salamanca se saldó con dos muertos y 18 heridos, uno de ellos grave. Los dos fallecidos eran buscados bajo los escombros por los especialistas del Cuerpo de Bomberos de la la ciudad. Las primeras hipótesis apuntan a que el siniesto se produjo por un escape de gas.
El siniestro se origió sobre las 13:30 horas en el ático del número 35 de la calle General Pardiñas, en la confluencia con la calle Ayala. Hasta el lugar acudieron 20 dotaciones de Bomberos y 16 ambulancias del Samur. De las 18 personas heridas cuatro fueron trasladadas hasta centros sanitarios, según explicó Carmen Camacho, subdirectora general del Samur Madrid. Sin embargo, desde el primer momento se supo que faltaban dos operarios que trabajaban en una reforma en el ático del edificio.
La mayoría de los lesionados fueron por la caida de cristales y cascotes, pero también recibieron asistente otras tres personas por crisis de ánsiedad en el colegio Nuestra Señora de Loreto, ubicado frente al edificio siniestrado. En todo caso, tres niños del centro sufrieron rasguños a causa de cristales que fueron proyectados hasta al patio del centro. La tragedia podría haber sido mayor si el siniestro hubiera coincidido con la entrada o salida de los alumnos.
La deflagración, «presuntamente debida a un escape de gas, aunque no se puede confirmar todavía al cien por cien», se produjo en la cuarta planta del inmueble, pero afectó también a los tres primeros pisos. Gemma Martín portavoz de Emergencias Madrid, informó de que la mayoría de los heridos se encontraban en el interior del edificio.
Tras rescatar a las víctimas se puso en marcha la búsqueda de los dos operarios que trabajaban en el inmueble, tal como indicó el jefe del operativo de los bomberos, Rafael Ferrándiz. Para ello se procedió al apuntalamiento de las estructuras y tabiques, muy dañados por la deflagración.
Por motivos de seguridad se procedió al desalojo e inspección de los edificios colindantes al siniestrado. La Policía Municipal incorporó a media tarde varios drones para aportar imágenes del siniestro a los bomberos que revisaban las estructuras. Los especialistas del cuerpo contaron también con la ayuda de dos perros adiestrados en la búsqueda de personas para tratar de localizar a los empleados. Ferrandiz insistió en las dificultades radican en «la falta de seguridad al desconocerse el alcance de los daños estructurales»
El supervisor de bomberos, Roberto Moreira, destacó que la prioridad era «localizar a las dos personas desaparecidas». Se trataba de dos operarios que estaban trabajando en obras de pequeña envergadura de fontanería. «La situación es complicada y nuestra prioridad es mantener la seguridad de los servicios de rescate», apuntó. Para ello se colocaron sensores y testigos de movimiento.
Dado el espacio donde se les buscaba era muy pequeño, «los trabajos son lentos y concienzudos. Se emplean rastrillos, las manos y espuertas para desescombrar y con cintas para sacar el material fuera», dijo Moreira. La posibilidad de que sigan con vida «la mantenemos hasta el final. Hasta que no encontremos a las dos personas desaparecidas mantener la esperanza abierta», añadió.
El alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida, anunció a media tarde el hallazgo de los cuerpos sin vida de los dos desaparecidos. Según dijo, ambos habrían percibido el olor a gas y fueron a cerrar los conductos, momento en que se produjo la explosión.
Martínez Almeida también informó que el herido que se encuentra en estado grave «es la persona que fue levantada en el aire por la explosión y que ha caído en un patio situado entre las calles General Pardiñas y Ayala». Esta víctima es un varón de 84 años, que se encuentra en cuidados intensivos en la UCI del hospital de la Princesa.
Hasta el lugar del accidente también acudió la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, para interesarse por la búsqueda de los desaparecidos y el estado de los heridos. «Todavía siguen los bomberos trabajando a destajo y comprometiendo su seguridad buscando a las dos personas de», dijo Ayuso que enfatizó que «están trabajando a contrarreloj para encontrarla».
Lucía, alumna de tercero de Primara en el colegio Nuestra Señora de Loreto, relató a la salida del centro que «nos hemos asustado mucho por la explosión y nos han dicho que había cuatro niños en el patio del colegio». Los padres y madres del colegio recibieron un correo electrónico advirtiendo del suceso y pidiendo que fueran a recoger a sus hijos lo antes posible. Varios de los alumnos destacaron que «olía mucho a gas» cuando salieron del centro.
«Ha sido una explosión impresionante, parecía una bomba. Había mucho humo y polvo hasta que hemos visto que era una explosión entre la calle General Pardiñas y Ayala», declaró un vecino. «Menos mal que estaban los niños comiendo dentro, si no hubiera sido horrible», añadió.